Nuestro planteamiento inicial gravitó en torno a las pistas de baile. Cuanto más pensamos en lo que representa este espacio para nosotres, más ahondamos en nuestros privilegios.
¿Quiénes están relegados en el dancefloor? Personas con discapacidad, personas con cuerpos diversos, personas queer, personas no hegemónicas. Es por eso que, un lugar que debería ser de encuentro y de liberación, no recibe a todes por igual.
El contexto actual nos lleva a pensar y pensarnos más allá. En un presente donde la asepsia nos aleja de cuerpos, sudores y existencias ajenas, ¿cómo pensamos las pistas en el futuro?.
El contexto actual nos lleva a pensar y pensarnos más allá. En un presente donde la asepsia nos aleja de cuerpos, sudores y existencias ajenas, ¿cómo pensamos las pistas en el futuro? ¿queremos que sigan siendo lugares de exclusión como son hoy?